19 de julio de 2013

Conjunto con espirales

Conjunto con espirales

 

Maribel



Se eligen varios colores que se prefieran, y otro más (aquí pintado de gris) que puede ser desechos de otras cosas, ya que no se va a ver, porque va por dentro.


Hacemos ocho laminas con los colores elegidos, se puede repetir colores o hacer cada lámina de un color.

De momento desechamos el gris (el de los desechos) ya que lo utilizaremos más adelante.

Con el resto, montamos las láminas de dos en dos, alternando colores.


Con cada dos láminas hacemos una espiral, con lo cual nos quedaría cuatro espirales, y cada una de colores diferentes.


Ahora hay que estirar cada espiral, para obtener el tamaño deseado (entre 0,5 cm y 1 cm de diámetro cada espiral), es muy importante que las cuatro espirales sean del mismo tamaño.


Cogemos cada espiral por separado y le vamos dando forma cuadrada, con los dedos, y apoyándola en un sitio plano, nos deben quedar los cuatro de forma parecida. 


Juntamos los cuatro tubos cuadrados, formando un cuadrado más grande.


Cortamos rebanadas, nos harán falta más o menos, 2 para los pendientes, que tienen que ser un poco más gorditos, y entre 8 y 10 para el colgante, esto pueden ser mas finos, porque se van a utilizar para recubrir un trozo de arcilla.


Las dos que hemos cortado más gorditas, son las que utilizaremos para los pendientes. Se pueden hacer de dos maneras, o hacer un agujero a la pieza para luego pasar un alambre, o fabricarte una anilla de alambre, e introducirla en la arcilla, si le haces alguna forma de ‘S’, al alambre que queda después de la anilla, lo puedes introducir fácilmente en la arcilla sin cocer, y luego aplastar la arcilla, y una vez cocida aguanta sin problemas.

Le damos forma, por ejemplo se puede dejar las placas tal como están, ponerle los bordes más finos, o marcar las aristas, según gustos.



Una vez acabados ambos pendientes, pasamos al colgante.

Con la arcilla que hemos dejado aparte al principio, hacemos una plaquita, que puede ser achatada por los bordes o de la forma deseada, recordad la forma de los pendientes, y hacedla similar quedará mejor, y la recubrís con los cuadraditos que tenéis cortados. Le dais la forma, como los pendientes.

Introducís una anilla, como la de los pendiente, y si a los pendiente le habéis puesto agujero, en lugar de anilla, pues le hacéis un agujero al colgante, tener en cuenta el material que vais a utilizar para colgarlo, porque de esto dependerá el tamaño del agujero, también podéis hacer un agujero pequeño, y colocarle una vez cocido, una anilla de las que venden.


Metéis vuestro trabajo al horno, ya sabes, en los paquetes viene el tiempo y los grados.

Una vez cocido y endurecido, hay dos opciones, barnizar la piezas, o lijarlas con una lija fina, lavarlas, y pulirlas (si se pulen con una media gorda, quedan muy bien). Si se lijan y se pulen quedan satinados y muy suaves, este truquillo me lo dijeron en el foro.

Una vez que tengáis las piezas terminadas, solo es cuestión de montar vuestro colgante y vuestros pendientes.

Yo opte por ponerle al colgante un cordón de cuero marrón, al que le puse unos cierres al final (color plateado, igual que las anillas que llevaba el colgante incrustado). Los pendientes, los hice con unas hebillas para pendientes, y entre la anilla que llevaba el pendiente y la hebilla, le puse una anilla normal redonda. Espero que os guste la idea, sabéis que solo es una idea, así como a mi se me ocurrió esto, se puede hacer de muchas maneras.

No hay comentarios: